martes, 7 de febrero de 2017
A la luz de la mañana
A la Luz de la mañana
A la luz de la mañana, la del sol resplandeciente
Así de pura y blanca viene la vida
En medio del amor, la nobleza e inocencia
Luego siente, razona y crece. ¡Viene la tarde!
Con neblina intensa, la luz se torna rojiza.
El caos lo transforma todo, los sentimientos cambian
¡El amor se tiñe de rabia!
La noche se asoma, uno no lo imagina.
Ya estarnos un poco viejos.
Añoranzas del pasado, revolotean de cuando en cuanto
La ternura, prioridad se vuelve.
Como en un inicio. ¡Oscurece completamente!
¿Así de simple es la vida? Porque más bien parece un tormento
Si simple o compleja, no es más que la mente jugando sin salida.
Te ves en el espejo y estás ahí
Eres la mañana que se volvió noche
El reflejo de un ángel que lucha contra el destierro
El matiz de una sombra que intenta ser feliz
¡Felicidad! ¿Un camino o un destino?
Un trayecto nunca recorrido
¿Si para feliz, el hombre ha nacido?
¡Para amar y ser amados, hemos venido,
Soñamos y despertamos, ¡Caemos!. ¡Nos elevamos!
A veces vivir no es tan sencillo
Ya no somos juguetes de la mente,
Más bien de alguien que esperamos.
Y ese alguien no es Dios.
iYa no voy a Ser feliz! Ya solo voy a vivir
Porque felicidad, es más una consecuencia
Y la vida solo el trayecto
Dios deja de jugar en algún momento
Para que el hombre pueda elegir su camino
Nacidos para amar y ser amados.
Dos veces lo he dicho en este verso
Aunque amar y ser feliz, suene perverso,
¡Eurekal ¡La felicidad ha llegado!
Entonces la mañana tiene sentido
El atardecer, futuro
Y la noche, descanso.
Finalmente, hemos aprendemos a vivir
¡Si!. A la luz de la mañana
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