Algún día llegaremos a ser lo que estamos destinados a ser

MI DIARIO

Cuando eventos de la vida te ponen de cara a la muerte, empezamos a cuestionarnos si estamos viviendo la vida que soñamos o que pensábamos vivir cuando eramos pequeños 

Hoy, por primera vez después de mucho tiempo he sentido que he encontrado el rumbo que le quiero dar a mi vida; a pesar del cansancio, he sentido la satisfacción  de ir en la búsqueda de algo que  puede tener impacto en la vida de las personas. ¡Eso es lo que quiero en mi vida! Mejorar en algo la vida de los demás. 

Hace unos días, le pregunté a alguien   qué era lo que le motivaba para seguir manteniéndose firme en la fe, y no darse por vencido (como quizá me había dado yo) . Cito textualmente lo que, esta persona dijo " Me motiva el hecho que tengo una esperanza, tengo fe de que a pesar que estoy actuando mal.... hago bien a los demás, trato de vivir las demás normas del evangelio, leer mis escrituras, orar, ir a la iglesia. Pienso que así puedo compensar lo malo que soy, y que el señor será misericordioso conmigo, no que me salve, sino que el castigo sea menos". Debo decir que esta persona es un  amigo mío, maestro de profesión que ha crecido bajo normas cristianas, y lo que él llama maldad, estoy seguro, que son acciones que a él le hacen sentir culpable y que otras personas ni siquiera calificarían como malo. 

Hoy he decidido tomar prestada la luz de mi amigo y la de un compañero de trabajo, que tienen una vida digna de admirar, supongo que como todos los jóvenes , él tiene sus errores, pero es reconfortante saber que existen personas que aún han hecho de los valores cristianos un estilo de vida. Estos días que he compartido mucho este compañero de trabajo, me ha quedado claro que está dispuesto a seguir a Cristo aún por encima de lo que piensen los demás. La posición que más me impresionó, fuera de las discrepancias que podemos tener debido a puntos doctrinarios, fue lo que me dijo mientras almorzabamos hace unos días "No se trata de cumplir o nó, un mandamiento, si no de preguntar si lo que hacemos agrada o no a Jesucristo. 

Dos mensajes, dos ejemplos, que me hacen querer volver al camino; y es que , buen o malo, en esencia, yo también pienso igual que ellos. He podido sentir el amor de Cristo hecho realidad en mi vida, y sobre todo alguna vez también fui ejemplo para que algunas personas puedan seguir a Cristo. No sé que pase en el futuro, pero me esforzaré por volver a tener la luz que poseía antes.

El equilibrio en mi vida está volviendo. Estoy recuperando mi espiritualidad, estoy realizando trabajos me llenan de satisfacción. Poco a poco, paso a paso, gota a gota algún día llegare a vivir la vida que quiero vivir, ser lo que estoy destinado a ser, y convertirme en mi auténtico YO

"Un día llegaremos a vivir la vida que queremos vivir, 

ser lo que estamos destinados a ser y 

convertirnos en nuestro auténtico YO"