lunes, 5 de agosto de 2013
MI ALMA SE DELEITA EN LAS ESCRITURAS (2 NEFI CAP 4)
MI DAILY SCRIPTURES READING
Porque mi alma se deleita en las Escrituras,
y mi corazón las medita,
y las escribo para la instrucción y el beneficio
de mis hijos.
He aquí,
mi alma se deleita en las cosas del Señor,
y mi corazón medita continuamente en las cosas que he
visto y oído.
Sin embargo,
a pesar de la gran bondad del Señor al mostrarme
sus grandes y maravillosas obras,
mi corazón exclama: ¡Oh, miserable hombre que soy!
Sí, mi corazón se entristece a causa de mi carne.
Mi alma se aflige a causa de mis iniquidades.
Me veo circundado a causa de las tentaciones
y pecados que tan fácilmente me asedian.
Y cuando deseo regocijarme,
mi corazón gime a
causa de mis pecados;
no obstante, SÉ EN QUIÉN HE CONFIADO.
Mi Dios ha sido mi apoyo;
Él me ha guiado por entre mis aflicciones …..
Me ha llenado con su amor hasta consumir mi
carne…
He aquí, él ha oído mi clamor durante el día,
y me ha dado conocimiento … durante la noche.
Y de día se ha fortalecido mi confianza en ferviente oración…..
; sí, he elevado mi voz a las alturas….
Entonces,
si he visto tan grandes cosas,
si el Señor en su condescendencia para con los hijos de los
hombres
los ha visitado con tanta misericordia,
¿POR QUÉ HA DE
LLORAR MI CORAZÓN, Y PERMANECER MI ALMA EN EL VALLE DEL DOLOR,
y mi carne deshacerse,
y mi fuerza desfallecer por causa de mis aflicciones?
Y ¿por qué he de ceder al pecado a causa de
mi carne?
Sí, ¿y por qué sucumbiré a las tentaciones,
de modo que el maligno tenga lugar en mi corazón
para destruir mi paz y
contristar mi alma?
¿Por qué me enojo a causa de mi enemigo?
¡DESPIERTA, ALMA MÍA!
No desfallezcas más en el pecado.
¡Regocíjate, oh corazón mío,
y no des más lugar al enemigo de mi alma!...
No debilites mi fuerza por motivo de mis aflicciones.
¡Regocíjate, oh mi corazón, y clama al Señor y dile:
Oh Señor, te alabaré para siempre!
Sí, mi alma se regocijará en ti, mi Dios,
y roca de mi salvación.
¿REDIMIRÁS MI ALMA, OH SEÑOR? …
¿Harás que yo tiemble al aparecer el pecado?
¡Estén cerradas continuamente delante de mí las
puertas del infierno,
PUES QUEBRANTADO ESTÁ MI CORAZÓN Y CONTRITO MI
ESPÍRITU!
¡NO CIERRES, OH SEÑOR, LAS PUERTAS DE TU JUSTICIA DELANTE DE
MÍ,
PARA QUE YO ANDE POR LA SENDA DEL APACIBLE VALLE,
PARA QUE ME CIÑA AL
CAMINO LLANO!
¡Oh Señor, envuélveme con el manto de tu justicia!
¡Prepara, oh Señor,
un camino para que escape delante de mis enemigos!
¡Endereza mi sendero
delante de mí!
No pongas tropiezo en mi camino,
Antes bien despeja mis vías ante mí;
y no obstruyas mi
sendero, ….
¡Oh Señor, en ti he puesto mi confianza,
y en ti confiaré para siempre!
No pondré mi confianza en el brazo de la carne
Porque sé que maldito es aquel que confía en el brazo de la carne.
Sí, maldito es aquel que pone su confianza en el hombre,
o hace de la carne su brazo.
Sí, sé que Dios dará liberalmente a quien
pida.
Sí, mi Dios me dará, si no pido impropiamente.
Por lo tanto, elevaré
hacia ti mi voz;
sí, clamaré a ti, mi Dios, roca de mi rectitud.
He aquí, mi voz ascenderá para siempre hacia ti,
mi roca y mi Dios eterno.
AMÉN.